2011 ha sido un año especialmente duro en muchisimos ámbitos, pero doy las gracias por todo lo ocurrido, porque parece que la consciencia va emergiendo de ese manantial más profundo que todos tenemos.
Si, de pequeños se nos enseña que hay que conseguir unas cosas para ser felices y nos olvidamos de nosotros mismos. No es un pecado que nos lo hayan enseñado asi, pero es una idiotez seguir con ese modo de vida, por otro lado tan arraigado dentro de cada uno de nosotros.
Las palabras son conceptos, y poco vale escribir un libro o 100, es algo que cada uno de nosotros debe vivir desde la experiencia.
Los conceptos, lo mortifican todo. Creemos que la razón y los conocimientos nos deben guiar. Nos sentimos inseguros si no clasificamos lo que tenemos delante y acabamos clasificándonos a nosotros mismos y encasillándonos. Tenemos que estar afiliados a un tipo de cultura, religión, nacionalismo, partidos, para poder ver los contrarios y nos perdemos la vida en estas batallas. Gracias a esto, los cambios tardan tanto en llegar, pues estamos amaniatados al miedo, al miedo de perder algo exterior a nosotros, que nos da el significado de vida, más alla de la pura realidad.
Para 2012, mis deseos son poder caminando por la vida, mirando hacia adelante, viviendo el presente, con salud y con la sabiduría para discernir las cosas importantes.
Más concretamente, me gustaría seguir adelante en mi grado universitario. Todo tiene su momento, y ahora es el mio.
Por supuesto que a mis hijas no les falte el sustento diario, pero es algo que me corresponde a mi seguir luchando como hasta ahora y tan solo no poner obstáculos a lo que tenga que venir.
Y a todos vosotros, QUE SE OS CUMPLA TODO, TODO LO QUE PIDÁIS!
