martes, 29 de julio de 2008

LLEGO EL VERANO


Seguimos adelante en la preparación de Berlín y hay que confesar que uno empieza a ser de carne y hueso y la recuperación ya no es la que era. Cierto que hay una neumonía y cambios de objetivos en la vida, por medio, pero lo que llegué a sufrir este fin de semana en los duros entrenos programados por un servidor, se puede tratar de un "bienvenido a los 40".
Una vez más y ya sé que es mejor ser fanático de correr que de estar en un bar, no acabo de entender al que hace de esto toda su vida, y por mi contacto en la tienda y carreras hay unos cuantos. Creo que es un complemento más, para tratar de estar mejor con uno mismo y poder hacer felices a nuestros seres queridos e indirectamente hacer una sociedad algo mejor.
Cambiando de tercio mi sobrino ha acabado el Tour en el puesto 39º. Nada mal para este jovenzuelo, pero creo que este deporte agoniza y tiene que dar un cambio de 180º si quiere volver a hacer una fiesta nacional cuando gana un español el Tour, que no fué así por estos lares.

La foto es de la salida de la Carrera dels Poblats Ibérics que fué hecha por ración doble por mi grupo, y que acabamos extenuados. Recomendada para preparación primera fase maratones de otoño.

jueves, 17 de julio de 2008

NO LO OLVIDEMOS




A menudo cuando realizamos un esfuerzo sobrehumano como una maratón en la que llegamos tocados, un Ironman, una clásica cicloturista de muchos kilómetros, etc, etc., afloran unos sentimientos que nos hacen ver la vida de otra manera, aunque sea por unos momentos.

Cuando lees crónicas como la de mi amigo Joan Boada en su recien acabado Ironman de Austria me doy cuenta de esto que comento.

http://trisidents.blogspot.com/2008/07/ironman-de-austria.html

Pero claro, no podemos estar cada día haciendo un IM, y lo que debemos intentar es recordar diariamente esos momentos en los que nuestra familia nos hizo poner piel de gallina en aquella llegada, y trasladarlo diariamente a la monotonía de la vida real. Cuando nos levantamos cada mañana y al acostarnos después de la dura jornada laboral debemos pensar en aquella llegada donde nos dimos cuenta que sin "ellos" no tendría sentido ni siquiera el estar en aquella carrera.

Quiero decir que el acabar un IM debe ser muy duro, pero el esfuerzo, disciplina y entreno por ser mejores cada día junto a nuestras familias, es lo que admiro verdaderamente.